- El Congreso de Tlaxcala avaló reformas a diversos artículos de la Constitución para prohibir la reelección consecutiva y el nepotismo en cargos de elección popular, sumándose a otros estados que ya han adoptado estas medidas.
Guillermo Veloz//La Noticia de Tlaxcala
Tlaxcala, Tlaxcala., 11 de marzo de 2025.- El Congreso del Estado de Tlaxcala aprobó este viernes reformas a los artículos 55, 59, 82, 115, 116 y 122 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, enfocadas en eliminar la reelección consecutiva y combatir el nepotismo en cargos de elección popular. Estas modificaciones buscan impedir que familiares directos o personas con vínculos cercanos asuman cargos públicos de manera sucesiva, fortaleciendo así los principios democráticos y la transparencia en la entidad.
La iniciativa fue presentada por el diputado Vladimir Zainos Flores, integrante de la Comisión de Puntos Constitucionales, Gobernación, Justicia y Asuntos Políticos, quien destacó que la reforma no limita los derechos político-electorales de la ciudadanía ni de los aspirantes a cargos públicos. Durante la sesión, las diputadas Blanca Águila Lima, Laura Yamila Flores Lozano y Lorena Ruiz García también presentaron propuestas para reformar las leyes de Salud Mental y del Comportamiento Adictivo, de Fiscalización Superior y Rendición de Cuentas, y el artículo 132 Bis de la Ley Municipal de Tlaxcala, respectivamente.
Con esta aprobación, Tlaxcala se suma a otros estados que han respaldado la reforma constitucional contra el nepotismo y la reelección consecutiva. Hasta el 5 de marzo, al menos ocho congresos estatales habían avalado estas modificaciones, y se espera que más entidades se unan en los próximos días.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, envió estas reformas al Congreso de la Unión el pasado 5 de febrero, en el marco del 108 aniversario de la Constitución de 1917, con el objetivo de reforzar la democracia y combatir cualquier forma de corrupción en el país.
Estas reformas representan un paso significativo hacia la consolidación de una democracia más sólida y transparente en México, al garantizar que los cargos de elección popular no sean monopolizados por grupos de poder o relaciones familiares, promoviendo así una representación más equitativa y justa para la ciudadanía.