Guillermo Veloz//La Noticia de Tlaxcala
Apizaco, Tlax., 27 de marzo de 2025.- A partir del 31 de marzo, el Gobierno Municipal de Apizaco, a través de la Dirección de Servicios Municipales, comenzará a aplicar sanciones a quienes sean sorprendidos arrojando basura en la vía pública. Estas multas oscilarán entre 5 y 100 Unidades de Medida y Actualización (UMAs), dependiendo de la gravedad de la infracción, y podrían complementarse con trabajo comunitario en casos de reincidencia o imposibilidad de pago.
Esta iniciativa busca mantener la limpieza del municipio, proteger el medio ambiente y fomentar una cultura de responsabilidad entre los habitantes. Sin embargo, surge la interrogante: ¿será esta medida suficiente para erradicar una problemática tan arraigada en la comunidad?
Experiencias en otros municipios mexicanos muestran que la implementación de sanciones económicas por tirar basura en la vía pública no siempre ha resultado en una solución definitiva. Por ejemplo, en la Ciudad de México, la Ley de Cultura Cívica establece multas de 11 a 40 UMAs por esta infracción, además de posibles arrestos de hasta 24 horas o trabajo comunitario. A pesar de ello, el problema persiste en diversas zonas de la capital.
Asimismo, en Ecatepec, Estado de México, el Bando Municipal 2025 propone sanciones de 60 a 100 veces el valor diario de la UMA para quienes tiren basura en las calles, lo que podría superar los 11 mil pesos. No obstante, la efectividad de estas medidas aún está por evaluarse.
Es fundamental considerar que, si bien las sanciones pueden disuadir a algunos infractores, la solución a largo plazo requiere de una estrategia integral. Esto incluye campañas educativas que promuevan la conciencia ambiental, la mejora en la infraestructura de recolección de residuos y la participación activa de la comunidad en programas de reciclaje y limpieza.
Además, la aplicación efectiva de las multas dependerá de la capacidad del gobierno municipal para supervisar y hacer cumplir las normativas. Sin una vigilancia adecuada y constante, es probable que las sanciones no tengan el impacto esperado.
En conclusión, aunque la iniciativa del Gobierno de Apizaco representa un paso hacia la mejora del entorno urbano, es esencial complementarla con acciones educativas y estructurales que aborden las causas subyacentes del problema. Solo a través de un enfoque holístico se podrá lograr un cambio duradero en los hábitos de la ciudadanía y en la limpieza del municipio.