Redacción/La Noticia de Tlaxcala
Tlaxcala, Tlax., 17 de abril de 2025.- El reciente hallazgo de dos cuerpos calcinados en el municipio de Tenancingo, Tlaxcala, ha encendido nuevamente las alarmas sobre la creciente violencia en la región y la preocupante pasividad de las autoridades estatales. Aunque la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE) informó que ha iniciado las investigaciones pertinentes —con estudios forenses para identificar a las víctimas y diligencias a cargo de la Policía de Investigación—, lo cierto es que este caso se suma a una lista creciente de crímenes que permanecen impunes.
A pesar del despliegue protocolario de agentes y peritos, no se ha ofrecido información sustancial sobre los avances de la indagatoria. Tampoco hay claridad sobre el posible móvil o si existen líneas de investigación sólidas. La ciudadanía, una vez más, recibe respuestas vagas mientras se normalizan hechos de extrema violencia que deberían estremecer a toda la estructura gubernamental.
Más preocupante aún es la falta de pronunciamiento enérgico de parte del Gobierno estatal y del Congreso local. La ausencia de una postura pública que condene estos hechos y exija resultados contundentes deja entrever un sistema de justicia rebasado, sin capacidad de respuesta y con escaso interés en atender la crisis de seguridad.
La impunidad se ha convertido en el telón de fondo de la violencia en Tlaxcala, y la muerte violenta de un adulto y un menor —hasta ahora presuntos— calcinados a plena vía pública, es reflejo de un tejido institucional que requiere algo más que comunicados para recuperar la confianza ciudadana.
