- La delincuencia en la capital de Tlaxcala sigue en aumento. Dos motocicletas Italika fueron robadas en el estacionamiento de la Facultad de Trabajo Social y Psicología de la UATx. A pesar de la presencia de cámaras del C5i, la Policía Municipal no actuó, lo que genera críticas hacia la directora Monserrat Xicohténcatl por su incapacidad para frenar la inseguridad.
Redacción//La Noticia de Tlaxcala// Foto: Diseño El Gritón Digital
Tlaxcala, Tlax., 13 de marzo de 2025.- La Universidad Autónoma de Tlaxcala (UATx) se ha convertido en un nuevo escenario de la creciente ola de delincuencia que azota la capital. El reciente robo de dos motocicletas Italika en el estacionamiento de la Facultad de Trabajo Social y Psicología ha dejado al descubierto la ineficacia de las autoridades municipales para garantizar la seguridad de los ciudadanos.
A pesar de la existencia de cámaras del C5i que registraron el ilícito y de los esfuerzos por localizar a los responsables, la Policía Municipal, bajo la dirección de Monserrat Xicohténcatl, no tomó acción alguna. Este tipo de robos se ha vuelto recurrente, al punto de que la propia facultad ha solicitado a los estudiantes no estacionar sus motocicletas en el lugar.
Los afectados acudieron a la Fiscalía para interponer las denuncias correspondientes, exigiendo justicia ante la indiferencia de las autoridades. La directora de la policía, Monserrat Xicohténcatl, ha sido objeto de múltiples señalamientos por su incapacidad para frenar la inseguridad en la capital. Desde su nombramiento, ha enfrentado críticas por parte de elementos de la corporación, quienes cuestionan su experiencia y capacidad para el cargo. Denuncias por hostigamiento laboral y presuntas irregularidades han sido constantes durante su gestión.
La ciudadanía clama por un cambio urgente en la estrategia de seguridad. El incremento en el robo de vehículos y autopartes, sumado a la presencia de delincuentes que encuentran refugio en la capital, evidencia la falta de control y respuesta efectiva por parte de las autoridades municipales.
Es momento de que las autoridades municipales asuman su responsabilidad y tomen medidas contundentes para frenar la delincuencia que aqueja a la capital. La seguridad de los ciudadanos y la confianza en las instituciones están en juego.
