Guillermo Veloz
Tepeyanco, Tlax. 23 de octubre de 2024. En el corazón de Tlaxcala, los campos de Tepeyanco se visten de un vibrante color naranja con la llegada de la temporada de cempasúchil, la flor emblemática del Día de Muertos en México. Cada octubre, este símbolo de vida, muerte y resurrección florece en abundancia, conectando a la región con una profunda tradición cultural y religiosa.
El cempasúchil, también conocida como la “flor de veinte pétalos”, no solo tiene un significado espiritual, asociado a rituales y ofrendas que rinden homenaje a los seres queridos fallecidos, sino que también representa una fuente de ingresos crucial para los agricultores locales. La comercialización de la flor en Tlaxcala y el vecino estado de Puebla genera empleos temporales y atrae a turistas que buscan participar en las festividades del Día de Muertos.
Esta temporada no solo es un reflejo del patrimonio cultural de México, sino también un motor económico que impulsa a las comunidades rurales de la región. A través de la producción y venta de cempasúchil, Tepeyanco reafirma sus raíces y mantiene viva la conexión entre el ciclo de la vida y la muerte, mientras sus campos continúan siendo un símbolo vivo de esta ancestral tradición.